Los bombarderos de Once

• Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)
• 03/03/2015
• (10 comentarios )

Hace apenas dos meses, en una nota con Leandro Ramella tratamos en profundidad el problema de porcentajes que Quilmes tenía en el tiro de tres puntos. Era el peor de la Liga con 28.1%. Luego en enero y febrero mejoró muchísimo y el global subió a 31.2% (el porcentaje desde enero es del 34.8%). Su último partido en Lanús ganó y lanzó 12/24 en triples. Y anoche en Once Unidos sencillamente vivió y dependió de él, como nunca antes en la era Ramella: Fueron 15/21 con un soñado 71%. Un juego descontextualizado para que el cervecero supere a un combativo y durísimo Libertad de Sunchales.

La defensa de Quilmes salió dispuesta a cortar la circulación entre el base Keyron Sheard y sus pivotes, para que no lo dañen en un solo pase en el juego interior. Y fueron muy buenos los primeros atrapes al juego de pickandroll donde Libertad sufrió dos malos tiros y tres perdidas (7-0) pero tardó muy poco la visita en darse cuenta del negocio.

Empezó a apurar sus ofensivas y no le permitió a Quilmes establecer su dura defensa del cinco contra cinco. Así el juego se convirtió por largos minutos en un correcalles, ya que Quilmes también elaboró ofensivas muy cortas entendiendo que tuvo un porcentaje de ensueño en el tiro de tres puntos (6/6) en cuatro manos diferentes: Baxley, Clark, Maciel y Cequeira.

La lluvia de triples de Quilmes lo ayudó a estar siempre con el dominio del tanteador, no así del juego. De hecho el primer cambio fue de Ramella, quien mandó al campo a Romero por Gallizzi para tratar de ganar presencia en el juego interior.

No obstante la tendencia no cambió y el primer cuarto se fue con el local arriba 27-20 y con Libertad sin haber realizado cambios en la formación.

El segundo segmento comenzó con dos triples seguidos más: uno de Clark y otro de Baxley (8/8) para que Quilmes abra una distancia de 11 (33-22). De todos modos esa situación de meter tanto de tres puntos, solo o con la marca encima, siempre es un arma de doble filo porque el equipo se acostumbra a resolver todo desde allí.

Y el dominio del juego paso a ser de Libertad quien entendió los momentos para acelerar, para poder jugar con sus internos y lastimar mucho con Jiri Hubalek y Alejandro Alloatti (27 de los 37 de su equipo promediando el cuarto).

Quilmes no le pudo encontrar nunca la vuelta a la marca de su poste bajo donde los de Sunchales trabajaron muy bien en el individual y en los rompimientos con pase el poste bajo. Con apenas 4/9 en triples a diferencia del enorme 11/15 de Quilmes Libertad plantó batalla por obra y gracia de su juego interior. El primer tiempo se lo llevó el local con un goleo de otra liga: 54-45.

El segundo tiempo abrió con un triple de Cequeira, como para ratificar que las estrellas se alinearon con el cervecero y esa tónica fue la dominante. Baxley y el pibe Sansimoni se unieron a la fiesta del triple. Con Quilmes corriendo arriba por 13 (64-51) llegó la tercera falta de Hubalek, y para frenarle el altísimo goleo al checo de 2.08 mts (18 puntos en la primera mitad) Maxi Maciel, dando ventajas de centímetros lo marcó muy bien anticipándolo.

El 3/3 en triples de Quilmes fue alimentado con una mejor performance en el poste bajo del local que terminó el tercer cuarto con 23 puntos, pero su dinámica ofensiva nunca la pudo cobrar en defensa, donde Libertad, encontró siempre argumentos valiosos para lastimar a Quilmes. En el segmento apareció Mariano Fierro, que no había jugado en todo el primer tiempo y aportó dos dobles con faltas (6 puntos seguidos).

En el tramo final el local mantuvo una distancia que osciló entre los 9 puntos y los 11 a lo largo de casi todo el parcial. A falta de 7 minutos los de Sunchales lograron descontar a 7 (79-72) pero después del minuto de Ramella un parcial de 4-0 le devolvió la distancia de dos dígitos (83-72).

Bruno Barovero metió un doble y triple seguido, pero fue contestado por acciones de doble y falta de Maciel y un contraataque después de recupero. Y otra vez la distancia en 11 (88-77). Así a toda intensidad y goleo se mantuvo el juego.

A falta de 3 minutos y medio Quilmes equivocó los caminos. Se notó mucho el cansancio de algunos jugadores (4 jugadores arriba de 30 minutos) al igual que Libertad (también 4 con más de 30 minutos). La rotación de la media cancha se hizo muy corta y hubo faltas de ideas. El equipo de Ramella aceleró cuando tenía que pensar y Libertad aprovechó los errores del local, y fue a cargar muy fuerte el rebote ofensivo (18 en total) para conseguir segundas y terceras instancias para ponerse solo a 5 falta de 1:20 (90-85).

En el marco de la incertidumbre otra vez fue Walter Baxley el hombre clave. Metió un triple sobre la marca a falta de un minuto que prácticamente sentenció el juego (93-85). Luego llevó la distancia a 10 xon dos libres y para decorarlo, un doble de 6,70 mts (apenas pisando la línea) otra vez con la marca encima. Del otro lado Ivory Clark creó una falta ofensiva y el juego se cerró bien para el cervecero que se dio un gustazo de local al poder sobre producir desde el perímetro donde habitualmente sufre los partidos. Libertad no se rindió nunca y tuvo varios puntos altos, a pesar de la ausencia de Jonathan Machuca. No lo ganó porque Quilmes tuvo su noche mágica, que lo disfrutó para seguir prendido arriba.

Síntesis
Quilmes (99): Luis Cequeira 12, Walter Baxley 31, Maximiliano Maciel 13, Ivory Clark 10 y Tayavek Gallizzi 2 (FI) Diego Romero 10, Luca Vildoza 14, Rubén Wolkowyski 4, Bruno Sansimoni 3, DT: Leandro Ramella.

Libertad (89): Keyron Sheard 16, Jonathan Slider 3, Anthony Dandrige 12, Alejandro Alloati 13 y Jiri Hubalek 24 (FI), Bruno Barovero 11, Mariano Fierro 8, José Vildoza 2. DT: Gabriel Picatto.

Parciales: 27-20, 54-45, 77-67.
Árbitros: Fabricio Vito y Fabio Alaniz.
Estadio: Once Unidos - Mar del Plata.

Fotos: Carlos de Vita / Ligateunafoto.com y LNB.com.ar
Crónica: Pablo Tosal @pablotosal