Papá Noel no fue la única barba que acaparó la atención durante la última semana de 2016. James Harden prendió fuego las pantallas alrededor del mundo en la despedida del año regalando básquetbol del mejor.
Uno de los seis partidos que integraron la última jornada de 2016 fue el que protagonizaron los Houston Rockets y los New York Knicks; y Harden no solo la rompió, sino que hizo historia. El encuentro fue para el equipo texano por 129 a 122 con una performance brillante por parte del escolta, autor de nada menos que 53 puntos, 17 asistencias y 16 rebotes en 42 minutos de juego.
No es un error de tipeo, ni nada por el estilo. Jame Harden terminó con una actuación sin precedentes. Por primera vez un jugador cierra un partido con al menos 50 puntos, 15 rebotes y 15 pases gol. Además, igualó el récord de Wilt Chamberlain con más tantos anotados en una triple decena, al tiempo que consiguió su propio récord en puntos y triple anotados (9), como así también igualó el de más asistencias repartidas.
Pero no solo por esta actuación en particular sino por la gran temporada que está brindando, se convierte decididamente en uno de los principales candidatos a ganar el premio al Jugador Más Valioso, algo que se le viene negando pese a su excelso nivel.
En la 2014/2015 fue la ocasión en la que más cerca estuvo de llevárselo, claro que la lucha fue ante Stephen Curry, quien no solamente se quedó con el MVP (también con el anillo de campeón), sino que también lo consiguió al año siguiente. De todas formas la votación fue muy pareja: El base de los Warriors ganó por 1198 a 936 puntos.
Un año antes, en la 2013/2014, también estuvo en la consideración de los colegas estadounidenses pero quedó en la quinta posición, siendo Kevin Durant el galardonado. Ya en 2016, si bien también terminó siendo uno de los jugadores más destacados, “apenas” quedó en noveno lugar.
La 2016/2017 parece que puede ser la oportunidad de Harden, al menos para conseguir ese premio que todavía le es esquivo. Comúnmente ésto va de la mano con el andar de su equipo y, lejos de cualquier casualidad, la marcha de los Rockets está en sintonía con la clase majestuosa de básquetbol que la Barba despliega noche tras noche.
El equipo de Texas ostenta un registro de 26 victorias y 9 derrotas con el que se ubica tercero en la conferencia Oeste, a solo tres juegos y medio de los Golden State Warriors. Hasta el momento parece que el estilo de ofensivas rápidas que implementa Mike D’Antoni le sienta a la perfección a Harden, quien no solo lidera a los Rockets en anotaciones (28.5 ppp) sino también en asistencias, con un promedio de 12 - el más alto de toda la NBA -. Su nuevo rol de base es otra de las cuestiones que están siendo positivas.
Su octavo triple doble de la temporada puso nuevamente en el ojo de todos a James Harden. Parece que su techo es cada vez más alto, y su equipo goza de muy buena salud. La temporada recién está terminando de armarse, y el recorrido aún es muy amplio. Sin embargo, queda claro que la Barba quiere ir por todo.
Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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