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A la brasilera

El comienzo del partido fue muy parejo, los dos equipos fueron muy eficientes en ataque y atrás se mostraron con muchos desajustes, dejando para el espectáculo un muy buen primer cuarto. El local abusó con el pick and roll central entre Juan Ignacio Laterza y Rodrigo Goncalves donde el pivote brasilero sacó réditos anotando 10 puntos, que fue bien acompañado por un Karel Guzmán agresivo con el tiro exterior y sus penetraciones para culminar con nueve conversiones.

Por el lado de la visita, Martín Gandoy se hizo dueño de las ofensivas, lastimando en el poste bajo ante Xavier Carreras. El nacido en pergamino fue secundado por Keenan Peterson que supo correr la cancha llegando como tráiler para así culminar en un 23-23 final en los primeros 10 minutos.

En el segundo cuarto, la tónica no se modificó para nada. Ciclista siguió percutiendo con Goncalves pero con un detalle más, el jugador además de generar puntos desde el pick and roll, también supo enfrentar el aro y hasta convertir un lanzamiento externo y así terminar con 23 tras 20 minutos. Los de Concepción del Uruguay quienes llevaban el marcador arriba siempre (máximas de tres a cinco puntos que volvían a igualarse) pasó de ser Gandoy dependiente a cosechar su gol de manera más equilibrada y esto fue lo que más le costó a los de Tasso a la hora de descifrar en el costado defensivo y así el juego en dos cuartos culminó 42 – 45 para Rocamora.

Tras el descanso largo, los de Varas fueron los encargados de seguir llevando el ritmo de las acciones con buenas defensas y acciones positivas que seguía sumando Gandoy. Los de Concepción del Uruguay llegaron a gozar de la máxima diferencia (siete), fue el momento donde Tasso acudió al fondo de su banco y sacó a la luz a Nahuel Barrozo y Gianluca Vismara quienes se cargaron el equipo al hombro para que el Verdirrojo no solo recorte la diferencia sino que también pasen al frente con 4:34 en el reloj.

El base juvenil, junto con el ala pivote combinaron energías de atrás para adelante y así Ciclista pudo correr y darle de beber de la misma medicina a su rival. El tercero con un desenlace totalmente diferente a lo que fue el inicio del mismo terminó 67–65 para los anfitriones.

En el último cuarto, Tasso no movió las fichas que le dieron de comer en el tercer segmento y el rédito fue mayor porque de esa vitalidad para poder impedir la claridad ofensiva de Rocamora, también pudo seguir ampliando su casillero del contraataque y así tomar una distancia inesperada teniendo en cuenta el desarrollo del cotejo.

De ahí en más las fotos fueron todos del local que selló su tercera victoria en casa con un resultado final de 89 a 80 y la alegría que al gran partido disputado sobre todo en el primer tiempo de Rodrigo Goncalves que finalizó con 31 puntos, los 16 de Karel Guzmán, también encontró el lugar para Gianluca Vismara que anotó 12 puntos (su máxima desde que está en el equipo verdirrojo) viniendo desde el banco, además de cuatro rebotes y la lucidez y la gran actuación de Nahuel Barrozo que arrojó números muy buenos: 14 minutos, siete puntos, tres rebotes y una asistencia (12 de valoración).

Para los de Varas, el sabor que pudieron dominar el juego por mucho tiempo de los 40 minutos pero no alcanzó. Martín Gandoy así como lo hizo en la última presentación del equipo en Capital Federal fue la figura con 23 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias.

Foto: Diario La Verdad

Hindú le sacó el invicto a Oberá

Una laboriosa y doblemente reconfortante victoria logró Hindú derrotando a Oberá 98 a 85 y de esta manera volvió a la senda del triunfo y dejó sin invicto a los misioneros. Nuevamente su extranjero Kenneth Jones encabezó su lista de goleadores con 21, pero ahí nomás le siguió Pablo Fernández con 19. En la visita se destacaron Hooper con 26 y Corzo con 18.

Todo comenzó con mucha paridad, donde los dos parecían respetarse demasiado y ninguno tomaba riesgos, haciendo lo estrictamente necesario. En medio de esa paridad los locales impusieron la potencia de Jones bajo los tableros y así se alejaron a 6, pero rápidamente aparecieron las respuestas de Hooper y Ludueña para primero igualar y luego pasar al frente por primera vez 24-23.

El segundo parcial fue un calco del anterior y en medio de un partido intensamente disputado, ninguno podía sacar ventajas porque en definitiva se repartieron errores y aciertos. En ese vértigo Hindú lo pudo cerrar mejor y se quedó con el cuarto.

Del descanso largo el “Verde” volvió con mayor actitud y dando una gran muestra de carácter y un intratable Pablo Fernández, logró alejarse a 10 (55-45 y 62-52) pero nada estaba definido ni mucho menos, porque OTC no se daba por vencido y apagaba cualquier intento de Hindú en escaparse. De todas formas los de Rovner ya le habían encontrado la vuelta a un complicado adversario y mantuvieron la diferencia de 10.

El último cuarto continuó siendo de ida y vuelta, pero ya con un Hindú más suelto y dispuesto a no dejar escapar el triunfo. Su jerarquía individual volvió a pesar cada vez más en la balanza y de esta manera logró quebrar a un aguerrido adversario, recién sobre el final.

En definitiva fue una importante victoria del “Bólido Verde” que volvió a ganar y ahora espera reconfortado otra edición del clásico ante Villa. Oberá demostró que será rival de cuidado para cualquiera y cayó recién cuando el equipo se quedó sin combustible en el final.

Síntesis:

Hindú 98: Martín Cequeira 9, Mauro Coronel 8, Pablo Fernández 19, Kenneth Jones 21, Pablo Moya 13 (FI) Cristian Romero 13, Julián Morales 10, Favio Vieta 5, Lucio Reinaudi 0. DT: Eric Rovner

Oberá 85: (24-43-61) Santiago Ludueña 14, Lucas Gornatti 9, Sergio Rupil 3, Mauricio Corzo 18, Chris Hooper 26 (FI) Leonardo Ruiz Díaz 2, Lisandro G. Quinteros 7, Ignacio Pérez 6, Taiel G. Quinteros 0, Federico Aby 0. DT: Sebastián Torre

Estadio: Hindú Club

Árbitros: Alejandro Zanabone y Sebastián Moncloba

COMENTARIOS (1)

ROCAMORENSE 06/11/2017

No digo que Varas sepa o no sepa. Pero si digo que los jugadores, no le dan ni bola. Hacen la que quieren y así les está yendo. En los minutos que pide durante el partido es más que elocuente la falta de interés que ponen sus dirigidos cuando imparte los sistemas. Cruel realidad.

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