Con gran emoción entre los hermanos Pau y Marc Gasol empezó el juego en el AT&T Center de San Antonio. Los locales impusieron su ritmo desde temprano y se apoyaron en LaMarcus Aldridge. El número 12 tomó la posta, mareó con su juego de pies al que se le puso al frente y marcó 17 puntos en los primeros seis minutos para darle una holgada diferencia a los locales (19-7).
Con cinco por jugar ingresó Manu Ginóbili, quien apenas tuvo una asistencia y dos puntos. Memphis intentó entrar en juego luego de haber ingresado dormidos, pero los de Popovich no les dejaron nunca hacerlo y cerraron con autoridad el primer chico (28-21). El inicio del segundo cuarto fue distinto: Los Grizzlies se pusieron duros atrás, contuvieron a los tiradores y anotaron en transición en el otro costado para acercarse en el score a sólo uno en el minuto cuatro (35-34).
A causa de la remontada, el banco de los Spurs pidió tiempo muerto y en la reanudación del juego los texanos reaccionaron con cuatro puntos en fila de Aldridge. En el final (y con Ginóbili en cancha) los visitantes cometieron de nuevo errores infantiles (dos pérdidas) y los del argentino no perdonaron (58-49). Con Tyler Ennis empujando la remontada y Harrison dirigiendo, los Grizzlies se acercaron de a poco en el score en los primeros cuatro minutos del juego. Sin embargo, San Antonio mantuvo siempre el ritmo de juego hasta el final.
Con Ginóbili en el rectángulo de juego, los locales ganaron en dirección y con un doble de Kyle Anderson cerraron el anteúltimo cuarto con supremacía (79-73). Con la formación exterior Forbes, Murray y Green los de San Antonio crearon una falange defensiva, anotaron con facilidad y metieron un mini parcial de 5-0 para mantenerse al frente en los primeros tres minutos del periodo (84-79).
En el minuto siete, el ingreso de Aldridge al campo le dio un giro de 365 grados al partido. Anotando de trailer en transición y en el poste bajo en el juego estacionado, el interno de Popovich marcó seis puntos seguidos (41 en total). Luego, un triple de Mills a falta de dos por jugar sentenció la cosa y los texanos se llevaron un nuevo triunfo ante un difícil rival (104-95).
CRÓNICA IGNACIO MIRANDA
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