No perdona rivales

• Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)
• 27/10/2006
• (48 comentarios )

No juega bien, al menos no todo lo que puede. No juega lindo, lejos esta de hacerlo, sin embargo a un equipo muy duro y muy difícil Peñarol le sacó 20 puntos en el último cuarto. No hay más realidad que esa, bien pragmática ¿se quiere más?. Peñarol es un equipo que convence por KO técnico. Desgasta a los rivales. En los peores momentos como conjunto sobrevive en las individualidades, y cuando tiene 5 minutos de furia arrasa a sus rivales. Deportivo Madryn llevaba el juego bien paradito, pero se quedó sin gol 5 minutos y Peñarol no lo perdonó.

El juego comenzó muy parejo, gol y gol en el primer segmento del cuarto inicial. Osborne que llevaba la mochila anotadora de Peñarol no podía contenerlo en defensa a Burgos. Entonces ambos equipos se lastimaban con los pivotes. Con un ráfaga de triples Peñarol paso de perder por dos (8-10) a ganar por 3 (17-14). Una constante en el partido fueron los parciales violentos a favor del local. A la larga condenó el resultado.

Para la visita hubo un par de de aristas interesantes. El goleo lo llevaba el alero extranjero Williams Sanders que no podía ser detenido por Marcos Mata. Mientras Pittman contenía a Carroll (desaparecido en toda la noche) un solo extranjero de Madryn tiraba del carro. Sebastián Rodríguez era superado por la defensa de Cristian Cadillac y Romano lo sentó por Festa que le dio más vértigo a la ofensiva milrayitas.

En el inicio del segundo cuarto con un parcial de 9-0, Peñarol rompió el juego por primer vez (31-23), sin embargo Demti pidió minuto, reorganizó su defensa como un bloque mas compacto cerca del aro y con el aporte de Sanders en ofensiva se puso a dos (34-32). Allí Peñarol aprovechó que Madryn no tuvo tiro de tres puntos (0/7 en el primer tiempo) y se quedó con la primera mitad (40-36) con un par de intervenciones oportunas de Pelletieri.

El tono discreto del primer tiempo fue una invitación al aburrimiento. El espectáculo no mejoró en el segundo tiempo sino que se terminó muy pronto el partido. Peñarol no lució dúctil en ataque, no encontró tiros claro, pero gozó del inconmensurable talento de Josh Pittman (4/5 en dobles, 2/2 en triples y 1/1 en libres) en el segmento. Pittman anotó 15 de los 24 puntos de su equipo en el parcial y llevó a Peñarol a sacar una diferencia de 14 puntos 52-38 y 61-47. Con los dos primeros triples de Madryn de la mano de Andy Rodríguez (cuando el equipo estaba 0/9) Madryn cerró a 8 el tercer parcial (64-56).

Daba la sensación que Peñarol tenía todo para quebrarlo pero no podía. Fue muy oportuna la doble base del final que ensayó el técnico Romano. Sebastián Rodríguez liberado de la responsabilidad de dar juego (en manos de Festa) se siente más cómodo como escolta y dio una andanada de puntos que le sirvió a Peñarol para despegarse nuevamente en el tablero. Demti probó en varios pasajes con Cadillac y Treise pero el base juvenil de la selección tuvo una mala noche (1/6 en triples) y su equipo lo sufrió.

Con un parcial de arranque de 14-2 en el último cuarto Peñarol sacó 20 de diferencia (78-58) a falta de 5:30. El partido la visita ya no lo podía discutir más. Comenzó a jugar con arrestos individuales y Peñarol no necesitó más las zonas combinadas que le dieron réditos parciales (triángulo y dos sobre los extranjeros).

Anticipadamente al final Romano mandó a los juveniles a la cancha y Madryn aprovechó en los minutos del cierre para recortar la diferencia cuando estaba todo sentenciado. En Peñarol cuando Pittman duerme, aparece Osborne, cuando se traban esta Mikulas y sino Tato Rodríguez. Mientras tanto, Locatelli se recupera de la lesión.

Madryn extraño el aporte combativo de Chiappero que le da más que defensa a su equipo: Las cortinas del “chapa” abren espacios en ofensivas, algo que sin dudas extrañó mucho Ryan Carroll.

Síntesis
Pañarol (90): Sebastián Rodríguez 13, Joshua Pittman 22, Marcos Mata 3, Jason Osborne 16 y Gabriel Mikulas 13 (FI); Sebastián Festa 8, José Muruaga 4, Alejandro Diez 2, Matías Pelletieri 7, Nicolás Lauría 2 y Valentín Blanco 0,. DT: Carlos Romano.

Deportivo Madryn (75): Jonatan Treise 7, Ryan Carroll 4, William Sanders 18, Andrés Rodríguez 16 y Alejandro Burgos 10 (FI); Cristian Cadillac 10, Maximiliano Maciel 8 y Mauro Bernat 2. DT: Fabio Demtis.

Parciales: 22-2, 40-36, 64-56
Árbitros: A. Ramallo - J. Mendoza
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas” (1700 espectadores)

Foto: Majo Gil - Depto de Fotografía de Pick and Roll
Autor: Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)

¡Qué alegría, Obras!

El Tachero se llevó una victoria valiosa de la Bombonerita. Boca todavía no pudo ganar de local. Un segundo tiempo notable de Obras, a la vez que Boca se desinflaba, le dio el triunfo al visitante por 89-80. Fue mérito del equipo que mantuvo la intensidad durante todo el juego y pudo disimular los momentos adversos.

El local manejó el marcador durante el primer tiempo, apoyado en la jerarquía de Gutiérrez (15 puntos, 6-12 de cancha), los aciertos de Legaria y algunas apariciones de Borrell. Leiva dominaba a Field pero no sumaba por su conocida deficiencia en los libres: 2 de 7. Obras, pese a que llegó a perder por 12 (39-27, a los 18m), no se enloqueció y siguió buscando la manera para incomodar a su rival. Defendió zona 2-3 cuando Boca presentó en cancha a Cequeira, Fioretti y Ortiz; rotó bien a sus internos a medida que se cargaban de faltas y evitó que Boca corra el contraataque con Spillers.

Sorprendió en el tercer cuarto la efectividad de Obras. Sin Wilson (encaprichado con el tiro), Rodríguez (10 tantos), Brown (7), Field (4) y Chaer (7) se combinaron para acertar 12 de 15 intentos, con 3-3 triples. Y pasó al frente por primera vez a los 26m, 56-55. Boca sintió el golpe. No rindió la dupla Legaria-Cequeira y tal vez sintió la ausencia del lesionado Oroná. En el último parcial Obras arrancó 14-0 (77-62). Del otro lado, Boca despintaba el aro (0-8 de cancha), sufría dos pérdidas y no salía de 62 en 5m sin anotar.

Luego a Gutiérrez se le soltó la cadena: hizo foul después de lanzamiento, protestó, recibió falta técnica, siguió la discusión contra el árbitro Estevez, que finalmente lo expulsó. El cordobés siguió puteando al referí y pretendió enfrentarlo. Spillers (ex boxeador) lo frenó, por suerte para el árbitro mundialista y para el futuro de Leo. Quedaban 3m, el partido estaba liquidado (77-64). Boca se llevó la peor parte: se quedó sin su mejor jugador, sumó la tercera derrota de local y mañana tiene otra parada frente a Quilmes. Para Obras el triunfo “fue un polvazo”, dijo un dirigente Tachero, y así lo festejó.

Síntesis
Boca Juniors (80): Raymundo Legaria 20, Matías Fioretti 3, Maurice Spillers 7, Leonardo Gutiérrez 21 (x), Martín Leiva 11 (x) (FI); Luis Cequeira 7, Lázaro Borrell 8, Lucas Ortiz 3 y Jonatan Slider 0. DT. Eduardo Cadillac.

Obras Sanitarias (89): Julián Olmedo 2, Patricio Rodríguez 15, Byron Wilson 8, Raheim Brown 21, Tyler Field 20 (x) (FI); Ezequiel Lamas 2, Daniel Chaher 13, Federico Pollio 2, Fernando Calvi 6, Julián Boris, Gonzalo Traverso y Sebastián Paz Duarte. DT. Pablo Dastugue.

Parciales: 22-14; 44-35 (22-21); 62-63 (18-28); 80-89 (18-26).
Árbitros: Pablo Estévez-Sergio Cameronez.
Estadio: Luis Conde (Capital Federal).
Autor: Marcelo Nogueria - Diario Olé