Para Indiana, la serie frente a lo Hawks puede llegar a ser más complicada de lo debido. Todavía es una incógnita el momento en el que llega el equipo que dirige Frank Vogel, que perdió 13 de sus últimos 25 partidos, y que estuvo a punto de ceder la sima del Este a mano de Miami luego de dominar toda la temporada.
Sin embargo las dudas acapararon a los Pacers, que de todos modos llegan como amplios favoritos al duelo frente a un equipo que fue el último en conseguir su clasificación en una conferencia Este de poco vuelo.
Hablar del estado de competencia que acarrean ambos equipos no es menor, ya que puede llegar a ser factor en el choque. Si se toma en cuenta la comparación jugador por jugador, los de Luis Scola llevan las de ganar en cualquier circunstancia.
Con la segunda mejor defensa de toda la NBA (92.3 ppp) Indiana no debería tener problemas ante un equipo que no cuenta con grandes referencias ofensivas; Más aún con la definitiva baja de Al Horford. El dominicano se lesionó en diciembre y sabía que se perdería el resto de la temporada (jugó solo 29 partidos), sin embargo hasta último momento se barajó la posibilidad de su regreso, pero el propio jugador se encargó de sentenciarla.
Uno de los pilares de Atlanta son Paul Millsap, máximo anotador - después de Horford - con 17.5 ppp (8.5 rpp). El ex Utah es referencia dentro de la pintura, aunque también tiene un vasto repertorio de frente al canasto y hasta cerca del perímetro.
Por su parte, Kyle Korver es una verdadera amenaza en tiros de tres puntos. Posee el récord de mayor cantidad de partidos consecutivos anotando al menos un triple (123), y por supuesto es una de las armas de los Hawks. Desde el banco emerge Louis Williams, un muy buen jugador que es más que una rueda de auxilio.
Si bien Mike Budenholzer, ex ayudante de Gregg Popovich, hizo un muy buen trabajo en Atlanta en su primera temporada allí y como entrenador jefe, porque además de alcanzar los playoff por séptimo año consecutivo con algunos problemas, intentó instalar un nuevo sistema de juego, donde el extra pase es ley. Así fue que lograron estar segundos en cuanto a asistencias por encuentro (24.9), solo detrás de los San Antonio Spurs. Nada es casual.
Pero el potencial de los Pacers es mayor. Los primeros dos juegos serán fundamentales para sacarse los nervios, convencerse que el mal momento es pasado y volver a ser ese equipo que parecía invencible. Paul George es la estrella dentro de un equipo cuya solidaridad es la clave. El alero tuvo una serie regular de ensueño con 21.7 puntos, 6.8 rebote y 6.5 asistencias por noche, es un gran defensor y puede levantar a Indiana cuando las cosas no vienen bien.
Es una serie para que Roy Hibbert demuestre todo su poderío en la pintura, y para que los Pacers se adueñen del ritmo de cada encuentro, y así tratar de sacar de la cancha a los Hawks, correr y no darle chances de recuperación. El dato: Las cuatro veces que se vieron las caras se repartieron dos triunfos por bando, de los cuales cada uno ganó uno fuera como visitantes.
Sebastián Ciano
Twitter: @Seba_Ciano
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