¿Se olvidaron del 20?

• José Fiebig (@Josefiebig en twitter)
• 24/10/2021
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(Opinión) La NBA elevó una lista de los 75 jugadores más importantes de su historia en orden de su 75° aniversario. Dentro de la misma hay varios sin anillos y con una relevancia para debatir. No aparece Manu por ejemplo. ¿Merecía estar el bahiense? Méritos de sobra tuvo...

Aprovechando su 75° aniversario, la NBA deslizó una lista con los mejores 75 jugadores de su historia. Sin dudas una lista que despertaría mucha polémica y sin saber a ciencia cierta las bases para colocar cada jugador más allá de los históricos y los que sabemos que no pueden faltar bajo ningún punto de vista. Ahora bien, aparecen muy pocos internacionales y entre ellos, la ausencia de Manu. ¿Merecía estar el bahiense en esa lista? Consideramos que sí.

Hay varios faltantes dentro de los 75 elegidos y varios que no parecen tener la autoridad suficiente para estar considerados como mejores en la historia, para semejante listado. Como siempre sucede, nadie tiene la verdad absoluta, y puede haber diferentes miradas, pero podemos ir a lo estadístico pero también a lo que generaron estando en la NBA y lo que marcaron más allá de triunfos dentro de un mundo donde los números juegan un papel preponderante sobre todo el resto.

Volvamos a la pregunta inicial ¿Manu merecía estar en esa lista? Ginobili realizó una carrera fantástica en la NBA. Llegó a un equipo sin grande logros ni historia y fue parte de un renacer de San Antonio en lo que fue el tridente más ganador de la historia junto a Parker y Duncan. Cerró sus 16 temporadas en la NBA con 4 anillos (en uno de ellos pudo haber sido el MVP en las finales ante Pistons). Además 762 partidos ganados con un porcentaje del 72,1& (el mayor porcentaje de victorias en fase regular sobre cualquier jugador superando 1000 juegos).

Manu terminó con 13.3 ppp, 3.8 app y 3.5 rpp dentro de toda su carrera en Spurs. Fue elegido el mejor sexto hombre, teniendo un rol diferente a Europa y acoplando todo su juego al colectivo para brillar desde otro lugar. Dos juegos All Stars sumado a ser el mayor ladrón de balones (1392) y máximo anotador de triples (1495) para Spurs. Su jugada reconocida como Euro Step fue tomada por varias figuras de la NBA para considerarlas en sus acciones ofensivas.

De hecho el valor de Ginobili estuvo más allá de todo lo que venimos diciendo. Generó un cambio cultural con su manera de jugar, su competitividad, sus fortalezas para progresar en un ambiente duro para los no norteamericanos y desplegar todo su talento dentro de una estructura donde encajó a la perfección y pudo dar mayores pasos de lo esperado. San Antonio le dedicó un día en especial, hubo carteles en español para que no se retire y la 20 quedó colgada en el cielo del AT&T CENTER.

El día de su retiro, todas las estrellas de la NBA se tomaron su momento para despedirlo en redes, hablar de todo lo que generó como jugador y persona. El último juego ante Warriors con aplausos de todas las gradas, incluidos los rivales y Steve Kerr intentando convencerlo para seguir en competencia minutos después de la eliminación de Spurs. Una relevancia total para alguien que generó mucho más que números y 4 anillos en la NBA. Un respeto absoluto con sus formas y el básquet que mostró durante tantos años generando un fuerte impacto para el sentir y desarrollo del jugador internacional y su potencia llegada a la NBA.

Es cierto, es solo una lista, que puede representar o no según el ojo y las vivencias de todos dentro del paño de la naranja. Ahora bien, ver dentro de esa lista a jugadores como Carmelo Anthony, James Harden, Anthony Davis, Damian Lillard o Giannis Antetokoumnpo suena extraño. Todos con brillantes estadísticas, rompiendo récords pero todo en números. Poco hicieron más allá de eso. Ni siquiera algunos históricos como Gary Payton si quieren incluirlo. O dejando fuera a Tony Parker, Pau Gasol, Joe Dumars, Ben Wallace hasta Derrick Rose o Drazen Petrovic.

No deja de llamar la atención y más viniendo de prestigiosos entrenadores, jugadores, ex jugadores y periodista del ambiente del básquet en Estados Unidos. Manu logró traspasar una barrera casi infranqueable para la época en la que llegó a la NBA. Progresó, se hizo su lugar y generó más de lo esperado, superando límites insospechados por su juego, sus maneras y esa cultura que dejó impregnada en Spurs y todo el torneo. Hoy mismo lo sigue teniendo ahí metido para proyectar jugadores y haciendo mejor al otro, siendo respetado casi como una leyenda y de forma icónica aunque la lista no lo diga.

José Fiebig

@Josefiebig